Presidente de AEDIPE y AEDIPE Comunidad Valenciana. Presidente de AECOP-EMCC España (coaching ejecutivo). Director del Master de Gestión del talento (www.mastergesta.es). Director de las jornadas TMT, Talento & Management Tendencias. Catedrático de Organización de Empresas en el Dpto. Dirección de Empresas (Facultad Economía, Universidad de Valencia), Coach Senior Certificado CS44. Conferenciante y Escritor. Y padre de dos hijas preciosas.

jueves, 4 de febrero de 2010

Inteligencia emocional en las organizaciones

No cabe duda que somos un cúmulo de emociones, sentimientos y estados de ánimo con un neocortex encima. De hecho, el neocortex aún no acaba de llevar de modo sincrónico esta relación con lo emocional. Unas veces, nuestro pensamiento no es más que un siervo de las emociones, otras, es capaz de al menos gestionarlas. Sin embargo, sigue siendo uno de los problemas más importantes en las empresas. Pero ¿quién gestiona las emociones en las empresas? Ese directivo cansado y abatido que carga la atmosfera de miedo e inseguridad. Ese supervisor que genera tristeza, apatía e incluso indiferencia entre su gente. Desde luego no hablamos de su “capacidad lógica y analítica”. Sino de su capacidad de comprender los entornos emocionales, de gestionarlos o incluso de crearlos. Este es realmente el papel del directivo lider transformacional.
En esta línea el pasado fin de semana nos fuimos de nuevo como el año pasado a un hostal rural enclavado en un paisaje privilegiado (http://www.miradordeljucar.es/) y dirigido por un artista Lucas Carrión Vazquez, Karrvaz (http://www.karrvaz.com/) , un artista que ha dejado los jardines del palacio de las artse en la ciudad de las artes y las ciencias de valencia lleno de obras de un gran valor y simbolismo. También en el palacio de la opera, y en muchos más espacios públicos. Aunque Lucas sabe que mi preferida la tiene en su hostal, y es parte de una obra de las cuatro estaciones, concretamente el Otoño.

¿Qué hicimos en este hostal de ensueño que mira al Jucar? Pues nos fuimos con Jose Luis y Victor (Viviendo del cuento, http://www.viviendodelcuento.net/; grupo Atman, http://www.grupoatman.es/) a trabajar la espontaneidad, ese arte de vivir el presente, de sentir, de escuchar nuestro cuerpo y nuestras emociones. Un trabajo formidable que los alumnos del Master Gesta (www.gestiondeltalento.es) han sabido aprovechar con su valentía y entrega en los ejercicios y en la implicación emocional. Trabajarse emocionalmente no es fácil y lo hemos podido comprobar este fin de semana. Pero desde luego creo que todos vinimos con la impresión que “siempre” vale la pena.

Gracias a todos porque siguen siendo experiencias inolvidables.

PD. Gracias a Jose (la mano derecha de Lucas en el Hostal) por su hospitalidad y personalidad tan encantadora.

2 comentarios:

Asia dijo...

Inolvidable....sobre todo las sensaciones y emociones vividas, es porque lo que más guardamos o recordamos son las sensaciones, estamos hechos por la emociones y sensaciones, nuestro instinto se dirige por las sensaciones (miedo, amenaza, placer etc), damos sentido a las cosas que pasan por las sensaciones, pero por otro lado pocas veces nos paramos para pensar en lo que sentimos o percibimos en el momento, no damos la importancia a lo que realmente es el motor de nuestra existencia. Curioso...

Rober dijo...

Vaya asia, te sento bien el fin de semana por lo que veo, me alegro. En efecto, no damos importancia a algo que en realidad nos mueve en la mayoria de nuestros comportamientos. Quizas es que tememos ver tambien esa realidad. Pero todos vivimos ese fin de semana lo que es vivir emocionalmente y en el presente... algo maravilloso.