martes, 22 de diciembre de 2009

La tensión y el estrés en el trabajo, un mal a combatir

En efecto las fuerzas del mal están en nuestras empresas. En el estudio que estoy publicando en medios (más de 50 medios han recogido dicho estudio en sus noticias en toda España) sobre la gestión del talento en la empresa española "Top Talento" uno de los datos que llama la atención es que en una de cada dos empresas la tensión y el estrés se ha adueñado de la empresa. Concretamente en un 55,4%. Permítanme una ligera reflexión al respecto, pues no se si saben que este estado de tensión prolongado es una de las causas de la ansiedad en los directivos. Esté estrés negativo llamado distrés, no hace más que reflejo de una excesiva carga fisiológica y emocional que disparan nuestras catecolaminas produciendo que nuestras funciones se aceleren y perdamos el equilibrio necesario para estar sanos, tomar decisiones y pensar y sentir con fluidez. Además, eso conlleva un envejecimiento prematuro, ¡imagine cuantos efectos positivos! Sólo espero que nuestros directivos estresados cuando vuelvan a casa al menos tengan otros sistemas más equilibrados como la familia o los amigos o incluso un ocio que les permita desconectar. Pero me da que no es así. Hemos generado una personalidad del directivo conocida como TIPO A donde se establece una dependencia del distrés: urgencias, prisas, se come rápido, se habla rápido, alarma en todo,… ¿le suena? No dude que su corazón lo sufre y padece generando cardiopatias diversas. Por favor cuide su corazón ahora más que nunca. Recupere el equilibrio de los sistemas ajenos al trabajo para que pueda compensar este desequilibrio, y sobre todo, no lo dude, usted es dueño de su vida y de cómo afronta todas sus situaciones. A veces un poco de tranquilidad, un “no pasa nada” o un decir que no, son más que suficientes. Pero ya ni siquiera sabemos decir esto. Se confunde la productividad con las prisas, y los resultados rápidos. Nada más lejos de la realidad. Pero bueno, esto ya es casi otro tema. Sólo sé que es un buen momento ahora en navidades para tener otro punto de mira de su realidad y de proponerse comenzar el 2010 de otra manera. Porque si no lo sabe, se lo recuerdo, usted puede cambiar todo lo que quiera de su vida… No lo dude. Les deseo unas felices fiestas y un feliz año 2010.
No dude en comentar lo que piense de esta entrada y de todas las que vengan, al fin y al cabo ¿qué es un blog sin sus lectores? Gracias

6 comentarios:

  1. Felices Fiestas a tod@s vosotr@s también.

    Al respecto del ambiente en el trabajo, aun recuerdo cuando en una de tus intervenciones dejaste bien claro que en algunas organizaciones 'el miedo se podía cortar con un cuchillo'; esto nos lleva a reflexionar sobre el tema de las emociones en el trabajo (http://kpk.kproductivity.com/2009/08/emociones-en-el-trabajo/) y preguntarnos porqué sigue empleandose aquello de la DPM (Dirección Por Miedo).

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  2. Lo primero desearte feliz navidad a ti también Rober y a Mar y a las pequeñas muchachitas.
    Estoy en total acuerdo con la entrada y el comentario de francisco “el miedo se puede cortar con un cuchillo” por desgracia esto ocurre en muchas más empresas de lo que me podía imaginar, pero también hay que tener en cuenta que el miedo se contagia es la peor enfermedad que tienen nuestras empresas en la actualidad, respecto a los directivos pienso que debido a que son “tipo A” crean unos estados emocionales dentro de la organización ya que los sentimientos se contagian sobre todo los malos
    Pero buena ya estamos en navidad y toca felicidad y demasiadas cenas jajajaj os deseo felices fiestas y que tengamos todos un prospero año nuevo

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  3. Hola chicos gracias por los comentarios, la verdad es que es un tema muy serio, pues toca la salud de nuestros directivos y empleados, sólo espero que poco a poco vayamos ganando en la conciencia de este cambio que es inevitable... bueno felices y gracias por estar ahí.
    Rober

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  4. Inevitable..., pero la travesía por el desierto será larga. Por otra parte, no olvidemos que los directivos son personas, y desgraciadamente avanzamos hacia una sociedad dominada por la ira (es una opinión muy personal) y en la que lamentablemente muchos tomarán el 'derecho a su día de furia'. Yo por mi parte, con mi 'espiritualidad' (por cierto, lo peor de la tensión en el trabajo es la 'resonancia').

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  5. Comentario muy oportuno, Rober.He vivido una situacion profesional donde el miedo formaba y forma todavìa (me consta) parte de la gestiòn de los colaboradores.Por fortuna, pude elegir y abandonar a tiempo.Lo lamentable es que ese método perdure, se extienda y se valore entre los mandos.
    Ello me lleva a reflexionar que cultura de una empresa es su mejor activo.Creo firmemente que las empresas basadas en la cultura del miedo arrastran un lastre tremendo: pérdida de motivaciòn, de iniciativas, espìritu individualista, pérdida de sinergias...en fin todo ventajas!

    Bonne année à tous de Montpellier!

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  6. Gracias a todos, en efecto el miedo, el estrés, la ira, la incomprensión, la rigidez,... son males muy cercanos en nuestras organizaciones. Algo hay que hacer, yo creo todos somos conscientes de la necesidad de un cambio,...

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